¿La pintura de 1860 de una mujer usando un iPhone?

¿La pintura de 1860 de una mujer usando un iPhone?

El arte es una de las expresiones más importantes para la humanidad. a través de las obras se pueden reflejar las vivencias, creencias, leyendas, hechos históricos y más de una época determinada.

Desde el barroco hasta el expresionismo y el realismo, hay piezas artísticas que han trascendido hasta llegar a la época contemporánea.

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Ya sea por su belleza, el increíble trabajo de sus autores o por el misterio que emanan, estas obras son importantes para la historia.

Tal es el caso de una pintura de 1860 que ha generado polémica, ya que según algunos internautas parece que la mujer que la protagoniza sostiene un iPhone, algo imposible ya que en esa época no existían tales avances tecnológicos.

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En la pieza se ve a una mujer encorvada y caminando con los ojos aparentemente pegados a lo que parece ser un teléfono.

El elemento que completa esta obra es que en el cuadro también se puede ver a un hombre agachado esperando para arrojarle una flor, pero ella ni siquiera levanta la mirada, lo que parece una escena que pudimos ver en este momento.

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la obra es el esperadodel pintor Ferdinand George Waldmüller, ubicada en la Neue Pinakothek de Munich, Alemania.

La realidad de las mujeres con el iPhone

Aunque los usuarios hicieron viral esta pintura, ya que sí parece una mujer joven con un IPhone, la realidad es que la pieza es del siglo XIX.

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La protagonista está clavada a su libro, no está mirando un celular como se insinúa.

“Lo que más me llama la atención es cuánto un cambio en la tecnología ha alterado la interpretación de la pintura. y, en cierto modo, ha aprovechado todo su contexto”, confesó Peter Russell, quien hizo la observación del cuadro.

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Agregó: “El gran cambio es que en 1850 o 1860, todos los espectadores habrían identificado el elemento en el que la niña está absorta como un himnario o un libro de oraciones. Hoy, nadie podría dejar de ver el parecido con la escena de una adolescente absorta en las redes sociales en su teléfono inteligente».

Y así es, apenas se viralizó el cuadro, inmediatamente se asoció la situación con una joven absorta en un celular, algo común en nuestra época.

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Aunque sí parece un iPhone, nuestra mente nunca imaginó que estaba leyendo el libro, ya que es más raro que esto suceda en esta época en que la tecnología rige nuestras vidas.

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